Atención de emergencias pediátricas

Tratamos una amplia variedad de emergencias pediátricas, desde enfermedades estacionales hasta lesiones graves. Entre los padecimientos más comunes que atendemos se encuentran:

• afecciones respiratorias, como tos, efectos secundarios del asma o neumonía;
• fiebre;
• resfriados y gripe (flu);
• lesiones traumatológicas, como fracturas de huesos;
• infecciones, como cuadros febriles (fiebre), infecciones de la piel o infecciones urinarias;
• crisis convulsivas;
• septicemia;
• lesiones por cuasiahogamiento;
• complicaciones del cáncer;
• afecciones gastrointestinales, enfermedad de Crohn o colitis ulcerosa.

Cada niño que llega a nuestras salas de emergencias recibe un examen físico del personal de enfermería para determinar el alcance de la lesión o enfermedad. Según el estado del niño, el médico de emergencias también podría solicitar análisis de sangre u otro análisis clínico, o pruebas de imagenología, como radiografías, para formular un diagnóstico.

En Baptist Health South Florida, nuestras salas de emergencias pediátricas disponen de acceso a toda hora a servicios de laboratorio y de radiología, para poder obtener los resultados rápidamente y avanzar con el tratamiento que corresponda lo más rápido posible.

Ya sea que tu hijo necesite un medicamento o una cirugía, tenemos acceso a un equipo completo de especialistas pediátricos que pueden brindarle el tratamiento que requiera.

En algunos casos, nuestros médicos y enfermeros de emergencias pediátricas podrían brindarle tratamiento en la salas de emergencias. Si tu hijo necesita un medicamento, curación para una herida o un yeso por una fractura, todos estos tratamientos se pueden realizar en el Departamento de Emergencias.

Si necesita un tratamiento más extenso, como cirugía o consulta con un cardiólogo, trabajaremos en estrecha colaboración con dichos especialistas para garantizar que reciba tratamiento cuanto antes. Es posible que haya que ingresarlo al hospital para que reciba más atención o que lo remitamos para un tratamiento posterior si está en condiciones de regresar a la casa.

Al llegar a una de nuestras salas de emergencias pediátricas, el personal de enfermería inmediatamente evaluará el estado del niño o adolescente. Si está gravemente enfermo, el equipo de especialistas en emergencias pediátricas inmediatamente comenzará con el tratamiento.

Si está menos grave, acompañaremos a ti y a tu hijo a una sala de tratamiento, donde los atenderá un enfermero . Un médico de emergencias pediátricas examinará a tu hijo y determinará si es necesario hacer otras pruebas; asimismo, colaborará contigo y con los especialistas en emergencias pediátricas para elaborar un plan de tratamiento.

Si es necesario hospitalizarlo, coordinaremos la atención con los pediatras hospitalarios lo más rápido posible.

Si tu hijo está en condiciones de regresar a la casa de manera segura, te darán instrucciones con respecto al tratamiento y la atención de seguimiento antes de que se marchen del hospital.

El momento indicado es cuando te preocupe el bienestar de tu hijo. No importa si tuvo una lesión leve o una enfermedad grave, nos encargaremos de atender a tu hijo. Si bien los pacientes que estén más enfermos serán los primeros en recibir atención, cada niño o adolescente que llega a nuestras instalaciones será tratado con la misma compasión y pericia.

Las Salas de Emergencias Pediátricas de Baptist Health cuentan con personal de enfermería y médicos especializados en el tratamiento de niños y adolescentes. Estos equipos se enfocan exclusivamente en afecciones pediátricas de emergencia y comprenden los retos particulares de tratar a un niño o adolescente. Muchos de nuestros especialistas están acreditados ante la Junta de Especialidades Médicas, recibieron capacitación en medicina de emergencias pediátricas, o bien, cuentan con más de 10 años de experiencia en salas de emergencias pediátricas.