¿Cómo se tratan los quistes pancreáticos?
Cada paciente de Miami Cancer Institute recibe un plan de tratamiento personalizado creado por nuestro equipo de especialistas en el páncreas. Nuestra filosofía consiste en encontrar un plan que trate sus quistes eficazmente y haga un seguimiento riguroso para detectar cualquier neoplasia. El equipo de atención considerará su diagnóstico específico y el tipo de quiste.
En algunos casos, podrían optar por la cirugía para extirpar el quiste. Podremos recurrir a la cirugía si:
- El quiste tiene más de 3 cm de largo.
- El conducto principal que drena el páncreas se ensanchó (dilató).
- El quiste provoca dolor o presiona otras partes del cuerpo, como las vías biliares.
- El quiste es sólido o parcialmente sólido.
Los oncocirujanos de Miami Cancer Institute son expertos en diversas formas de tratamientos quirúrgicos de vanguardia para los quistes pancreáticos, como las técnicas laparoscópicas mínimamente invasivas y la cirugía robótica.
Es posible que usemos otros procedimientos quirúrgicos abiertos, tales como:
- Operación de Whipple. Mediante este procedimiento se extirpa el lado derecho (cabeza) del páncreas, la mitad inferior de las vías biliares, parte del intestino delgado, la vesícula, los ganglios linfáticos circundantes y, a veces, parte del estómago. Luego, se vuelve a unir el resto al intestino delgado, el estómago y el páncreas para que el organismo pueda digerir los alimentos.
- Pancreatectomía distal. Este procedimiento consiste en extirpar el lado izquierdo (cola) del páncreas y parte del cuerpo del páncreas y el bazo.
- Pancreatectomía total. Mediante este procedimiento se extirpa la totalidad del páncreas, parte del estómago, la vesícula, parte del intestino delgado, parte de las vías biliares, el bazo y los ganglios linfáticos circundantes.
Si se somete a una cirugía para tratar los quistes pancreáticos, nuestros especialistas trabajarán con usted para ofrecerle un proceso de recuperación más rápido y menos doloroso, que implique menos tubos y drenajes. Miami Cancer Institute es ampliamente conocido por su programa de restablecimiento optimizado, que pretende mejorar la experiencia del paciente antes y después de la cirugía.
Si el riesgo de la cirugía es mayor que la probabilidad de que el quiste sea canceroso, el equipo de atención podría recomendarle vigilar el quiste. Dependiendo del tipo de quiste, es posible que su equipo de atención le recomiende vigilancia además de la cirugía.
Con la vigilancia, deberá hacerse periódicamente pruebas de diagnóstico y de imagenología para detectar cualquier cambio en el quiste que pudiera ser canceroso. Por lo general, las pruebas se realizan cada 6 o 12 meses, pero el intervalo varía dependiendo de su estado de salud y el tipo de quiste que tenga. El equipo de atención colaborará con usted para formular un programa de vigilancia que se ajuste mejor a sus necesidades y estado de salud general.