¿Cómo se trata el cáncer de esófago?
El plan de tratamiento dependerá de su edad, estado de salud general, el tipo y el estadio de su cáncer. Nuestros especialistas colaboran para planificar y supervisar su tratamiento mediante la aplicación de los métodos y protocolos más modernos y de comprobada eficacia. Este enfoque en equipo es esencial para el tratamiento del cáncer de esófago que a menudo se diagnostica en estadios más avanzados que responden mejor a los tratamientos combinados. El tratamiento puede incluir distintas estrategias, entre ellas:
Quimioterapia
Quimioterapia. En esta forma de tratamiento se emplean medicamentos que viajan por todo el organismo para destruir las células cancerosas dondequiera que se encuentren. Se utiliza frecuentemente para el tratamiento de cáncer de esófago porque este normalmente se diagnostica después de que se ha diseminado a otros órganos. La quimioterapia puede combinarse con la radioterapia para tratar el cáncer de esófago. Esta combinación se denomina quimiorradioterapia.
Radioterapia
Radioterapia. En esta modalidad de tratamiento se emplean haces de radiación de alta energía para destruir las células cancerosas y disminuir el tamaño de los tumores o eliminarlos por completo. Utilizamos los avances más modernos en radioterapia para tratar el cáncer esofágico de una forma precisa e intensa. El tratamiento a menudo comienza con varias semanas de quimiorradiación (radioterapia combinada con quimioterapia). Puede emplearse como el tratamiento principal o para disminuir el tamaño de un tumor antes de una cirugía. Asimismo, puede utilizarse para reducir un tumor a fin de que usted pueda tragar mejor, disminuir el dolor o para eliminar las zonas a las que se haya diseminado el cáncer en otras partes del cuerpo. Entre los métodos que podríamos usar para tratar el cáncer de esófago se encuentran:
- Radioterapia modulada por intensidad (IMRT). Se vale de computadoras e imágenes tomográficas tridimensionales para concentrar pequeños haces de radiación en el tumor o cerca de este sin afectar los órganos que lo rodean.
- Radioterapia guiada por imágenes (IGRT). Mediante esta técnica, los haces de radiación se adaptan a la forma del tumor y se emplean ecografía y otros métodos de imagenología para administrar dosis exactas. Este método garantiza que el movimiento natural del esófago no interfiera con el tratamiento.
- Braquirradioterapia. Este método administra la radiación desde dentro del organismo mediante una fuente radiactiva colocada en el esófago mientras usted se encuentra bajo los efectos de la anestesia.
- Sincronización respiratoria. Al utilizar la IMRT o IGRT aplicamos también la técnica de sincronización respiratoria para mejorar la precisión del tratamiento. Puesto que el esófago se mueve con la respiración, la sincronización respiratoria nos permite analizar el ciclo de su respiración y administrar la radiación solamente en determinados momentos. Nuestros médicos trabajan en estrecha colaboración para planificar la administración de la radioterapia.
- Terapia de protones. Mediante la terapia de protones se administran altas dosis de radiación para controlar y tratar el cáncer, y al mismo tiempo se disminuye considerablemente el daño a los tejidos y órganos vitales sanos. Miami Cancer Institute es el primer centro en el sur de Florida que ofrece esta modalidad de tratamiento y pone a su disposición una combinación exclusiva e incomparable de tecnologías sofisticadas.
Cirugía
Como parte de su plan de tratamiento y según su estado de salud general, el tipo y el tamaño del tumor, cuán profundo se encuentre y si el cáncer se ha diseminado a los ganglios linfáticos u otros órganos, podríamos recomendar una cirugía. En la mayoría de los casos la mejor opción es la cirugía robótica y nuestro equipo se cuenta entre los más expertos en el empleo de esta técnica. Es posible que primero se le administre quimioterapia y radioterapia para reducir el tumor antes de extirparlo. La cirugía puede implicar:

- Esofagectomía. El cirujano extirpa el tumor, parte del esófago, el tejido que rodea el tumor y los ganglios linfáticos a los cuales se haya diseminado el cáncer. A continuación se conecta el estómago con la porción restante del esófago sano. Si no hay estómago o si es necesario extirparlo porque también está afectado por el cáncer, se pueden usar porciones de los intestinos grueso o delgado para que usted pueda ingerir alimentos. Nuestros cirujanos poseen una vasta capacitación en técnicas mínimamente invasivas, incluyendo cirugía asistida por robot, para disminuir la posibilidad de daños a los tejidos sanos y ayudarlo a recuperarse más rápidamente. Después de la operación le haremos un seguimiento riguroso para prevenir o tratar complicaciones y efectos secundarios.
- Extirpación y ablación. Los tumores precancerosos o en sus primeras etapas se pueden tratar mediante mucosectomía endoscópica (EMR), en la cual el médico extirpa el tejido precanceroso o el tumor mediante un endoscopio (un tubo estrecho y flexible). También podemos emplear termoterapia, como por ejemplo ablación por radiofrecuencia (RFA por su sigla en inglés), en la que se emplea calor para tratar las zonas precancerosas.
- Implantación de stents (endoprótesis). Si el tumor está obstruyendo el esófago, el médico puede colocar un stent (también llamado endoprótesis; un diminuto dispositivo metálico o plástico) para mantener abierto el esófago.