Su experiencia de parto comienza al llegar a nuestra entrada privada. Luego, se instalará en una de las 12 salas de parto y recuperación, que cuentan con una hermosa decoración, para que se sienta como en casa.
Cada suite privada incluye todas las comodidades como en el hogar: una cama moderna, un sofá cama, una mecedora, una mesa de comedor, una cómoda, un televisor y muchos otros accesorios especiales. Y tras bastidores, nuestro sofisticado sistema de seguridad nos permite monitorear constantemente al recién nacido.
El horario de visitas es flexible para adaptarse a la rutina de su familia. Sus familiares y los hermanos del bebé pueden visitarla en el horario que más le convenga.
El bebé puede permanecer en un moisés junto a su cama durante toda su estancia. Pero si necesita un descanso o surge alguna complicación, puede tener la tranquilidad de que el bebé permanecerá en nuestra sala de recién nacidos totalmente equipada.
En caso de ser necesario, un neonatólogo certificado ante la Junta de Especialidades Médicas (un médico especializado en la atención de bebés de alto riesgo) está disponible en el centro las 24 horas para cuidar a su bebé en nuestra Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales de nivel II que recibió recientemente la aprobación del estado. Nuestros anestesiólogos certificados ante la Junta de Especialidades Médicas (médicos que ayudan a aliviar el dolor durante los procedimientos) también están disponibles a toda hora para atender al bebé.