La epilepsia y sus variadas opciones de tratamiento

Cuando pensamos en la epilepsia, probablemente pensamos en una persona que está experimentando una convulsión dramática, donde se caen al suelo con aterradores movimientos espasmódicos y pierden las funciones del cuerpo. Estos episodios, conocidos medicamente como “crisis tónico-clónicas generalizadas” o tradicionalmente como “convulsiones de gran mal”, son solamente uno de los distintos tipos de convulsiones  que ocurren cuando las neuronas del cerebro fallan y desencadenan neurotransmisores, lo cual ocurre con la epilepsia.

¿Qué es la epilepsia?

Según los Centros Para el Control y la Prevención de Enfermedades de los EE.UU. (CDC), la epilepsia es un trastorno del cerebro que causa que una persona experimente por lo menos dos convulsiones con más de 24 horas de separación. Con la epilepsia, no existe causa aparente, tal como medicamentos, actividad de drogas ilícitas o un desbalance metabólico, para que ocurra la convulsión.

Alberto Pinzón, M.D., un neurólogo con Miami Neuroscience Institute de Baptist Health

Alberto Pinzón, M.D., es un neurólogo con Miami Neuroscience Institute, que en colaboración con Baptist Hospital fue clasificado una vez más por la National Association of Epilepsy Centers (NAEC) como un centro de epilepsia Nivel 4, la clasificación más alta posible, en su más reciente acreditación. El Dr. Pinzón, junto con un equipo multidisciplinario que incluye a Regine Narchet, R.N., Supervisora de Atención al Paciente ENLS y Coordinadora de Epilepsia de Baptist Hospital, todos han desempeñado un papel importante en el éxito continuo del programa.

Según el Dr. Pinzón, la manera más definitiva de diagnosticar la epilepsia es con un electroencefalograma por video, o EEG. “Un EEG mide la actividad eléctrica del cerebro y el componente de video captura la reacción del cuerpo ante la actividad anormal del cerebro”, dice él. Algunos pacientes pueden usar monitores portátiles de EEG que monitorean su actividad cerebral mientras hacen sus actividades normales diarias en su casa, añade él.

Otros exámenes también pueden realizarse para detectar o descartar otras causas para las convulsiones. Estos exámenes incluyen:

  • Un examen neurológico
  • Un análisis de sangre para diagnosticar desbalances hormonales
  • Escanes por CT o MRI para encontrar lesiones en el cerebro que puedan indicar un infarto cerebral o la presencia de un tumor cerebral
  • Una punción lumbar para descartar un caso de infección
  • Pruebas “Wada” para evaluar el lenguaje y la función de la memoria

“Estas pruebas ayudan a formar un panorama completo para así proporcionar el diagnóstico correcto”, dijo el Dr. Pinzón.

El diagnóstico y el monitoreo de la epilepsia

El Programa de Epilepsia de Marcus Neuroscience Center de Baptist Health, el cual forma parte de Boca Raton Regional Hospital, tiene dos epileptólogos entrenados por beca y certificados por la junta – neurólogos que se especializan en epilepsia. El Instituto también tiene una unidad de monitoreo de epilepsia (EMU), la cual se utiliza para evaluar y diagnosticar la epilepsia y otros trastornos convulsivos.

Pooja S. Patel, M.D., directora del Programa de Epilepsia de Marcus Neuroscience Institute de Baptist Health

“Esta es la única unidad de monitoreo de epilepsia desde West Palm Beach hasta Fort Lauderdale”, dice  Pooja S. Patel, M.D., directora del Programa de Epilepsia de Marcus Neuroscience Institute de Baptist Health. “Durante una evaluación de EMU, un equipo especial rastrea la actividad cerebral de un paciente antes, durante y después de una convulsión, lo cual da a los médicos y al personal de enfermería información en tiempo real acerca de qué causa las convulsiones, su tiempo de duración, su frecuencia y la recuperación”. Al monitorear las convulsiones mientras ocurren, dice ella, los médicos pueden desarrollar un plan de tratamiento más personalizado y eficaz.

Tratamientos para la epilepsia

Una vez haya sido diagnosticada la epilepsia, es necesario comenzar a tratarla para así mejorar la calidad de vida el paciente y para evitar una discapacidad permanente debido a las convulsiones repetidas. La Dra. Patel dice que los pacientes se benefician de la nueva tecnología y que hay opciones de tratamiento disponibles para los pacientes en cuanto son aprobadas y comprobadas a ser eficaces.

“Los medicamentos a menudo son la primera línea de tratamiento para el nuevo comienzo de las convulsiones o la epilepsia”, dice la Dra. Patel. “Sin embargo, algunos pacientes con epilepsia difícil de controlar o intratable, pueden beneficiarse de otras opciones más avanzadas de tratamiento, incluyendo la cirugía y la neuroestimulación.

Los medicamentos

Las investigaciones han demostrado mejoras significativas en los medicamentos que se utilizan para enfocarse en ciertas áreas y funciones del cerebro para así controlar los distintos tipos de convulsiones que ocurren con la epilepsia.

“Ahora tenemos alrededor de 20 a 25 medicamentos que se pueden utilizar para ayudar a manejar la epilepsia y otros trastornos convulsivos”, dijo la Dra. Patel. “Es posible que tengamos que combinar varios medicamentos en base de ensayo y error para encontrar la fórmula que funcione mejor. Sin embargo, la mayoría de los pacientes logran controlar su epilepsia con la ayuda de los medicamentos”.

Opciones quirúrgicas
Para los pacientes cuyas convulsiones no responden a los medicamentos, tales como pacientes con “epilepsia medicamente refractaria”, también existen opciones quirúrgicas. Además de esos pacientes, la Dra. Patel dice que la cirugía también puede ayudar a los pacientes cuya epilepsia afecta a más un área del cerebro.

Algunos de los procedimientos quirúrgicos que se utilizan para tratar la epilepsia incluyen la ablación con láser, la cual usa el calor para destruir el área del cerebro que está causando la epilepsia, y la cirugía de resección, la cual remueve el tejido cerebral donde comienzan las convulsiones.

Marcus Neuroscience Institute de Boca Raton Regional Hospital de Baptist Health

Muchos pacientes se benefician de la neuroestimulación, según la Dra. Patel, durante la cual un pequeño dispositivo implantado ayuda a reducir o a prevenir las convulsiones. “La neuroestimulación es un tipo de tratamiento altamente especializado para la epilepsia que sólo es ofrecido en ciertos centros tales como Marcus Neuroscience Institute y Miami Neuroscience Institute”, dice ella.

Hay dos tipos de tratamiento de neuroestimulación, según la Dra. Patel. “Con la estimulación del nervio vago o VNS, los impulsos eléctricos generados por un dispositivo implantado en el cuello estimulan el nervio vago y reducen las convulsiones”, dice ella. “Y con el dispositivo de neuroestimulación receptiva (RNS), un dispositivo parecido a un marcapasos es implantado en el cráneo. Este dispositivo detecta la actividad cerebral anormal y administra estimulación eléctrica al cerebro para prevenir que ocurran las convulsiones”.

La Dra. Patel dice que estos avances tecnológicos, especialmente en los campos de los procedimientos mínimamente invasivos tales como el VNS y el RNS, están mejorando significativamente el manejo de la epilepsia y la calidad de vida de los pacientes que se someten a ellos.

Tratamientos complementarios
Además de los tratamientos médicos y quirúrgicos para la epilepsia, algunos pacientes han acudido a las terapias complementarias alternativas que han demostrado resultados prometedores.

Los pacientes con epilepsia refractaria, quienes han adoptado una dieta estricta cetogénica o “keto” por ejemplo, han visto el manejo eficaz de sus convulsiones. El Dr. Pinzón dice que eso se debe a que la quema de grasas en vez de carbohidratos para crear combustible para el cuerpo es lo que lleva a los cambios en el metabolismo del cerebro. Él dice que la dieta “keto” puede ser eficaz si se sigue cuidadosamente.

Vivir con epilepsia

El Dr. Pinzón dice que es importante tratar la epilepsia para controlar las convulsiones. “Nuestra inquietud más grande es el riesgo de discapacidad por causa de las convulsiones”, dijo él. “Las convulsiones inclusive pueden causar la muerte”.

Él advierte que el estigma asociado con la epilepsia se debe resolver a través de la educación de los pacientes, sus familias y el público en general. “La epilepsia es una condición médica que se puede manejar y se puede tratar”, dijo él. “Al educar a los demás acerca de esta enfermedad y de sus opciones de tratamiento, así como también ofrecer recursos sociales para ayudar a los pacientes y a sus cuidadores a lidiar con el manejo de las convulsiones, podemos minimizar el estigma y mejorar la calidad de vida de los pacientes”.

Miami Neuroscience Institute, un parte de Baptist Hospital

El Dr. Pinzón dice que el programa de epilepsia de Miami Neuroscience Institute incluye las técnicas de diagnóstico más avanzadas y procedimientos quirúrgicos para el manejo de la epilepsia, incluyendo procedimientos quirúrgicos de 2 etapas para la localización de la epilepsia y su tratamiento con opciones de resección o sin resección tales como VNS y RNS entre otras.

De igual importancia para el paciente, añade él, es que el programa de epilepsia combina enfoques de tratamiento avanzados con educación y con el manejo social de la enfermedad. “En Baptist, los pacientes tienen acceso a un enfoque multidisciplinario e integral para la atención de la epilepsia, incluyendo la optimización de los medicamentos, evaluaciones pre quirúrgicas completas y los más avanzados procedimientos quirúrgicos para la epilepsia”, dice el Dr. Pinzón.

Además, él añade que Baptist ofrece apoyo psicosocial para los pacientes y sus cuidadores. También tienen estudios de investigación continuos en colaboración con el departamento de ingeniería de Florida International University, los cuales pueden ofrecer oportunidades adicionales para algunos pacientes con epilepsia refractiva.

 “La participación familiar es algo crucial para el tratamiento de la epilepsia”, dijo el Dr. Pinzón. “El programa de Baptist Health reconoce eso y ofrece a los cuidadores todo el apoyo que necesitan. Estamos viviendo en tiempos muy emocionantes para ayudar a los pacientes con epilepsia a vivir vidas normales”.

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