Ciencia
En el corazón de los aneurismas aórticos
lectura de 4 min
Publicado: February 9, 2021
Available in English
Publicado: February 9, 2021
Available in English
Si usted ha sido diagnosticado con un aneurisma aórtico abdominal (AAA), usted debe estar bastante alarmado, y con razón. Cuando un AAA se revienta, casi siempre resulta ser fatal. Sin embargo hay buenas noticias; si es detectado temprano es algo muy tratable, dicen los expertos en Miami Cardiac & Vascular Institute, quienes han sido pioneros de los tratamientos menos invasivos para los aneurismas y también están entre los más experimentados.
El Instituto continúa involucrado en ensayos clínicos de dispositivos de última generación para tratar aneurismas. También está en proceso de crear el primer Centro Nacional para Terapia de Aneurismas en el mundo, donde médicos de distintas disciplinas colaborarán en conjunto para ofrecer la atención más avanzada para aquellos pacientes con aneurismas de la aorta, el cerebro, el riñón, el hígado o en cualquier otra parte del cuerpo.
“Desafortunadamente, a veces se les comunica a los pacientes con aneurismas aórticos abdominales que tienen una bomba de tiempo en el abdomen y estos se asustan mucho”, afirmó el radiólogo intervencionista Barry T. Katzen, M.D., fundador y oficial médico principal de Miami Cardiac & Vascular Institute. “Es importante darle seguimiento para ver si hace falta tratamiento o si el aneurisma es lo suficientemente pequeño que puede ser monitoreado. Nosotros seguimos a muchos más pacientes que son tratados con algún procedimiento mínimamente invasivo o con cirugía”.
Un aneurisma es un bulto o un área débil dentro de un vaso sanguíneo. En la aorta, puede ocurrir en cualquier lugar desde el corazón hasta el punto donde el suministro de sangre se ramifica hasta las piernas. Unos 200,000 estadounidenses son diagnosticados con un aneurisma aórtico abdominal cada año, según la Society for Vascular Surgery, y un AAA reventado es la décima causa principal de muerte entre los hombres de 55 años o mayores.
Aunque a un AAA se le refiere como una enfermedad silenciosa porque muy pocas personas tienen síntomas, existen factores de riesgo que todos deben conocer, dice el Dr. Katzen. Los factores de riesgo incluyen la presión alta y el colesterol alto, diabetes, arterioesclerosis u otras enfermedades cardiacas, sobrepeso, ser hombre y fumar. El vínculo con el tabaquismo es lo suficientemente importante que la U.S. Preventive Services Task Force recomienda una prueba de ultrasonido para los hombres de 65 a 75 años que han sido fumadores, aunque no tengan síntomas. La prueba está cubierta por el Medicare. Además, existe un componente genético, aumentando su riesgo si alguien de su familia ha tenido un AAA.
Si se detecta un AAA, los médicos estudian numerosos factores para determinar el mejor tratamiento. “Consideramos el tamaño y la localización del aneurisma y si el paciente tiene cualquier otro problema serio de salud para determinar si el riesgo de la ruptura es mayor que el riesgo del tratamiento”, dice el Dr. Katzen.
En general, la mayoría de los pacientes cuyos aneurismas son de 5.5 centímetros o menos serán monitoreados a través de un período de años para asegurar que el aneurisma no se engrandezca. Para reducir el riesgo de ruptura, a los pacientes se les puede recetar un medicamento para la presión además de estatina ya que la inflamación causada por el colesterol puede llevar a una acumulación de placa en una arteria y puede debilitar aún más el vaso sanguíneo. A los fumadores se les aconseja que dejen de fumar.
En el pasado, las personas que requerían una reparación de un AAA tenían un procedimiento quirúrgico mayor que involucraba abrir el abdomen para insertar un dispositivo de injerto. Hoy en día, la mayoría de los pacientes pueden someterse a una reparación endovascular del aneurisma (EVAR por sus siglas en inglés), un tratamiento mínimamente invasivo que también es ideal para aquellos que no sean buenos candidatos para una cirugía abierta. Miami Cardiac & Vascular Institute está entre los primeros cinco centros de investigación en los Estados Unidos en utilizar injertos stent aórticos abdominales en el 1994.
Durante un procedimiento de EVAR, los médicos ensartan un catéter a través de una arteria en le ingle hasta la localización del aneurisma y despliegan un dispositivo de injerto stent hecho de una combinación de maya metálica y tela. Cuando se deja en su lugar, el dispositivo encauza la sangre con seguridad a través de la sección debilitada de la arteria, aliviando la presión y previniendo que el aneurisma se reviente. Los pacientes usualmente se quedan en el hospital por una o dos noches.
Los médicos a menudo pueden afrontar aneurismas bastante complejos y aquellos con múltiples ramas usando el enfoque endovascular. “Podemos personalizar o crear un dispositivo para el paciente”, dijo el Dr. Katzen. “Estos procedimientos en Miami Cardiac & Vascular Institute involucran equipos de intervencionistas y cirujanos vasculares que brindan una experiencia máxima a nuestros pacientes. Podemos atacar aneurisma desde el brazo y desde la ingle a la misma vez para manejar una anatomía difícil. Mientras que estos procedimientos son complejos, son procedimientos mínimamente invasivos y la recuperación es más fácil que con la cirugía abierta”.
Para más información acerca del programa de aneurismas aórticos del Instituto, haga clic aquí
Atención médica que piensa en usted
Artículos relacionados
Ver todos los artículosLos infartos cerebrales versus los aneurismas: Distintos síntomas y tratamientos
October 4, 2024
lectura de 5 min
Un programa clínico innovador en Miami Cardiac & Vascular Institute mantiene a los pacientes en el camino hacia una mejor salud
September 26, 2022
lectura de 5 min